A unas semanas de que Kía reveló las imágenes de la nueva Sportage 2026 desde Corea del Sur, toca el turno de conocer los cambios que llevará para la región de Norteamérica. Y es que durante el inicio del Auto Show de Los Ángeles la marca dio un poco más de detalles de esta actualización de media vida.
Sí, un diseño ligeramente más cuadrado
Tal cual pasó con la variante coreana, la Kia Sportage de Norteamérica mantiene la misma imagen con una parrilla enorme, faros más cuadrados y que se extienden a lo largo y calaveras con nuevas firmas de luz, además de un par de diseños nuevos para sus rines.
Los cambios son notorios, pero no radicales y eso no está mal. Al menos para Estados Unidos, la marca planea seguir ofreciendo las variantes que conocemos en México más una X-Line que añade toques estéticos de corte off-road para sumarse a la moda de vehículos con estos detalles, pero que difícilmente verán una ruta off-road.
Es en el interior donde la firma coreana puso un poco más de énfasis. En esta área lo primero que llama la atención es el nuevo volante, que imita lo que ya habíamos visto con el Kia K4, también simplifican la distribución de ventilas en la consola central.
El sistema de infoentretenimiento sigue estando compuesto por dos pantallas de 12.3” para cuadro de instrumentos digital y la pantalla central que seguirá siendo compatible con Apple CarPlay y Android Auto de forma inalámbrica. Sin embargo, ahora en ciertos mercados, se podrá añadir de forma opcional un Head up display de 10”.
Algo que vale la pena mencionar es que Kia sí ha escuchado a los clientes y por ello mantuvo en un área separada los controles del aire acondicionado, aunque con ciertos elementos incluidos en un panel táctil. No siempre se ganan todas las batallas…
El resto del equipo será muy variado en todas las versiones y realmente más allá de lo citado no hay novedades y es que siendo sinceros lo que porta ya está a la par de lo mejor para su segmento.
Cosas como el sistema de audio Harman/Kardon, cargador inalámbrico, aire acondicionado de doble zona, asientos con ajuste eléctrico más memorias, ventilación y calefacción, techo panorámico, freno de estacionamiento eléctrico y una suite de asistencias avanzadas a la conducción más completa del segmento se quedan dentro de su oferta.
Cuando hablamos de mecánica quedan un par de cosas más claras y es que para el país vecino del norte, Kia seguirá ofreciendo variantes solo a combustión, variantes híbridas y una híbrida enchufable.
Los motores solo a combustión no tienen cambios por lo que esperamos siga usando el mismo 2.5 litros y 2.0 litros atmosféricos acorde a la versión. Sin embargo, la variante híbrida recibe un poco más de poder en el motor eléctrico para llegar a los 234 hp. Lo mismo sucede con la variante híbrida enchufable pues ahora gana 7 hp y alcanza los 272 hp.
¿Qué podemos esperar para México?
En mecánica las cosas deberían ser iguales, salvo la llegada de la versión híbrida con ese ligero extra de poder en el motor eléctrico, pero manteniendo todo lo demás.
El diseño sin duda alguna debería actualizarse, pero tal cual pasó con la variante anterior, las versiones X-Line y X-Pro de apariencia off-roader probablemente sigan sin estas contempladas en las alineación.
De igual forma, deberíamos ver el nuevo volante, cambios en el tablero y probablemente un acomodo del equipo en la gama para ofrecer más seguridad y confort desde modelos de acceso. Teniendo en cuenta cómo trabaja Kia es probable que este modelo se comience a ofrecer durante la primera mitad de 2025.
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